viernes, enero 06, 2006

emborrachando el destino


Y miro a la ventana, y el silencio se calla, suenan bocinas, alarmas y mi mundo se destruye,como en un abrir y cerrar de ojos.
La agonía de estar solo, de acomplejarme por el ruido perpetuo de todos, y mientras tanto mi silencio se distinge del tuyo, los gritos cambian en ti y yo simplemente dejo de existir, mi tiempo se descontrola, se emborracha, como quien toma un ron o un wisky bien fuerte. se acompleja el tiempo se emborracha de verdad, en una noche callada y molesta, en una noche con gritos y molesta, pero de algo estoy claro el tiempo despierta al otro dia y todo vuelve a ser igual.

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